Hay cosas que no se hicieron para mí, encabezando la lista con los deportes de riesgo.
No encuentro ninguna emoción en sobrevolar la ciudad aferrada a dos alas artificiales o en un globo al estilo Julio Verne.
Por culpa de mis ridículas fobias me perdí la posibilidad de sumergirme en las azules aguas de Xcaret. Aquello de pensar que unas patas de rana y un snorkel podían convertirme de pronto en una sirena me parecía tan poco probable que me quedé en la orilla a esperar el relato de mis amigas sobre el mundo submarino.
Mis pánicos no se limitan al mundo del deporte. Las alturas mayores a cinco metros me dan vértigo, los lugares pequeños me provocan claustrofobia y todo aquello que se mueva de manera artificial me marea. Esto último incluye autitos chocadores y cualquier montaña rusa que gire frenéticamente en círculos.
Hace seis años descubrí que había algo nuevo para agregar a mi listado de prohibiciones.
Un viernes cualquiera, después de mi trabajo, llegué hasta la casa de Diego que era mi novio hacía seis meses. Puse la llave en la cerradura, abrí la puerta y lo encontré sentado en la cocina junto a un tipo tatuado y con rastas al que no conocía. Aprovechando la puerta a medio cerrar, el visitante se escapó por el pasillo saludando apenas.
- ¿Quién era? - le pregunté con bastante curiosidad.
- El dealer - respondió con el mismo tono que hubiera dicho "el chico del supermercado".
- ¿Y desde cuando tenés un dealer?
- Desde recién. Es del barrio, lo conocía de vista. Le pedí que me traiga un poco de marihuana para que pruebes.
- Viví treinta años sin probar, ¿vos creés que es necesario que pruebe ahora?
- Y sí, dale. Vas a ver como nos vamos a divertir.
Cuando quise contestarle, él ya estaba encendiendo un cigarrillo armado con sus propias manos a los apurones.
- Tomá. Fumalo normal, como fumás los otros - me dijo como si eso necesitara de un manual de instrucciones para ser llevado a los pulmones.
Y yo fumé tal cual me dijo, como si fuera un Marlboro, sentada en una silla de la cocina mientras él me miraba y me mostraba una caja de alfajores que había para después de fumar.
Le convidé sólo dos pitadas porque, como él ya había fumado con rastaman, insistía en que fumara yo.
Me sirvió un café mientras hablábamos. Yo seguía fumando. Me contó sus anécdotas del día de trabajo. Yo seguía fumando. Me dijo que había alquilado una película y cuando quise levantarme para ir al living y acomodarme en el sillón para verla, empezaron los problemas.
El reloj de la cocina daba vueltas como si estuviera en medio del tornado de Twister. No sentía los pies y mi cuerpo se movía en cámara lenta como si me hubieran dado pausa con un control remoto imaginario.
- Diego, ¿vos decís que esto me va a divertir? A mí me está poniendo nerviosa - le dije mientras me arrastraba hacia el living como una oruga.
Después de que se produjera el milagro de llegar hasta el sillón, Diego puso la película.
Lo único que recuerdo de esas interminables horas en que la imagen se proyectaba en el televisor, es a él diciendo cada veinte minutos: ¡como corre esa bicicleta!
Bicicleta que ni con mi mayor esfuerzo alcanzaba a distinguir. Mi preocupación no era el rodado invisible a mis ojos, sino el grosor de mi piel. Algún hechizo debía haberme transformado en un monstruo de dos cabezas con piel de lagarto, porque al tocarme los brazos no podía sentirlos. Tampoco las mejillas...ni la frente. Así que me la pasé yendo al baño a mojarme la cara como si el agua pudiera devolverme a la normalidad. Supongo que de tantas veces que fui y vine debo haber dejado un surco en el pasillo y un charco del tamaño de Mar del Plata.
Entre medio, como una voz que provenía del más allá, lo escuchaba a Diego que se reía a carcajadas por una puta bicicleta que yo no alcanzaba a ver.
- Vení, vení, que te estás perdiendo lo mejor.
A esa altura yo había perdido todas las esperanzas de que el episodio del fasito fuera divertido y, con las pocas neuronas a las que no les había llegado el humo, repasaba mentalmente los hospitales cercanos.
- Diego, llevame al Alvarez.
- ¿Qué? Dejate de hinchar, que no estás para hospitalizarte.
- Diego, llevame, esto no es normal.
- Comete un alfajor, vas a ver que con eso se te pasa el efecto.
- ¿Estás seguro?
- ¡Obvio! Fijate.
Comí un alfajor. Nada. Seguía flotando como Alicia, pero en Floresta y sin tazas de porcelana ni conejos.
Comí otro. Igual.
Otro. Otro más.
- Diego, ya me comí cuatro alfajores y lo único que tengo ahora es ganas de tomar agua para bajarlos. ¡Esto no me saca el efecto! ¡Llevame al hospital, quiero ser la misma de antes!
- No seas tontita -dijo poniéndose meloso - ¿No sabés lo que dicen que hay que hacer cuando uno está fumado?
- No, ¿qué dicen?
- Que hay que tener sexo porque está rebueno.
- ¿Vos pensás que en este estado en que siento que me tragué una calesita voy a dejar que me toques un pelo? ¡¡Yo sólo quiero que esto se me paseeeee!!
Y dicho esto me deslicé como pude hasta el dormitorio. Diego me siguió entusiasmado pensando que yo había cambiado de idea. Hasta que se dio cuenta que mis planes eran otros: quedarme dormida para que al despertarme al día siguiente ya no me sintiera poseída por el lagarto de V.
Después de largo rato en el que intenté contar ovejitas que se llevaban por delante el cerco y caían desmayadas sobre la pradera, me dormí.
¡Santo remedio celestial! Al despertarme, mi piel había recobrado el tamaño natural y mis pies ya no flotaban.
- Buen día- me dijo el fanático de la bicicleta - creo que ayer te lo fumaste demasiado rápido, deberías volver a probar.
- Olvidate, que para muestra basta un botón. Eso no se hizo para mí.
Esa fue la única vez que probé marihuana. Sus efectos colaterales son similares a tirarme desde un puente para hacer bungee jumping con los ojos vendados.
La música de Bob Marley y el fasito buena onda integran mi lista de prohibidos desde aquella vez...
52 Blondas y algunos rubios no se callaron:
Yo he cachado que no le tengo miedo a casi nada. Y las "prohibiciones" son para mí más morales que otra cosa.
Pero igual me hizo gracia tu aventura, me reí bastante.
Besos!!!
en mi vida he probado marihuana. mi hermano ps si ha tenido experiencia con eso, pero sabes, se puede ser feliz sin eso o no?, aunque si. yo quiero tirarme de paracaídas!!!
blonda que suerte que lo dejaste lo de la marihurana si no hibbiera sido un desastre basta conir por cualquier calle y ver a los chicos drogandose con pegamento y el paco muchos besos amiga
yo nunca lo haria es en serio!
besos!
Los que sufrimos de vétigos, y diversas manifestaciones del pánico, generamos sustancias adrenalínicas en exceso. Con el "frondoso" mundo interior que tenemos no nos hace falta màs emociones (podemos morir de sobredosis!!).
Por todo eso mismo que describis que te pasa, yo nunca fumé marihuana ni probè nada que pueda vender un dealer. Tengo miedo a que mi sensibilidad extrema provoque un combo explosivo!.
Ya tengo demasiado con mis emociones y sensaciones autogeneradas!
Ay nooo es horrible!!.. la única vez que probe eso me fue super mal, no no no jamás lo volveria a hacer, entiendo como te has de haber sentido jaja
saludos!
Te jugó una mala pasada... supongo que será cuestión personal porque nunca me sucedió eso!
Un beso Blonda, qué más tenés en lista de prohibiciones?
A mi nunca me ha picado el bichito de la curiosidad con respecto a este tema....y ahora leyendo tu experiencia ...MENOS !!! ...jajajaj ..besitos Blonda!!
mmmm... si, seguro fué muy rápido. Yo fumé un par de veces y la verdad, no me hizo ningún efecto. Talvez lo hice muy despacio... jeje
Personalmente, creo que hacerte de esos hábitos es bastante oneroso... y bueh...
nunca he probado la marihuana aunque he tenido amigos demasiado cercanos que la consumen pero bueno es que no todos los vicios son para todos!
Jejej ya me imagino tu novio todo feliz por tener sexo fumando y quedò con las ganas en ese momento jejeje... ni modo... nadie lo tiene! jaja
Saludos a lo dejos amiga!
no se olvide de dar la vueltita jejeje
amiga Blond,
sabes que siempre te leo de punta a punta, y muchas veces he quedado asustado/traumado/congelado con tus relatos (ejemplo el del tiramisu)
no te enojes, pero esta vez no puedo terminar el relato,
llegue hasta donde dice:
*vivi 30 años sin probar, crees que es necesario que pruebe ahora?
*y si, dale, vas a ver como nos vamos a divertir
y creeme, no puedo seguir leyendo, no se como sigue la historia y la verdad no quiero enterarme, perdon por la mala onda pero es un tema muy muy demasiado personal, que me hace tenerle fobia/odio/ a la marihuana. algun dia te contare en privado el por que.
besito y buen finde, espero no lo tomes a mal
jajaja! Evidentemente no es para vos!
No probé ni siquiera cigarrillos porque no me tienta en lo más mínimo. Ni me lo planteo porque no me genera curiosidad. Simplemente no siento la necesidad de probar. Prefiero vivir la vida tal cual es y sin agregados.
Besos
uffffffffff yo solo una vez en mi vida fume marihuana... me dio tanto, pero tanto hambre me comi una pizza entera que habia sobrado de la noche... dije nunca mas, esta mierda me va transformar en una foca...
Recordé que tuve un amigo argentino cuyo nick en todo era Rastaman
CARLOS es un jodon barbaro!!!...se hace el puritano reprimido on purpose, quiere ver hasta donde lo bancan,y no le zampan una puteada
DEJATE DE JODER, CARLOS! JAJAJAJ
YO ME FUME UN FASITO Y ESTOY tranqui, con una cerveza y mi novia medio dormida..
Debo decir, que, en mi humilde analisis de LA FEMINAS 30 y pico solteraS con apuro, se encuentran en muchas fobicas, t-o-cs,quizas alguna odiosa empedernida de la cocina o la plancha, con una vision muy "bridget jones' de la realidad, o aspiraciones de "Carrie Bradshaw" (que si se (fumaba un porro y se cagaba de risa)
Por lo q lei (de ser cierto) la vida te golpeo (como a muchos de nosotros) a vos te golpeo en el electra imposible ya que tu viejo es impresentable...
Y bueH,volviendo a lo que uno le teme es a su sombra..quizas debas adentrarte en esas actividades que te provocan tanto panico, para conocerte mas y asi, conocer a tu alma gemela, que no sera ni mas ni menos que vos y tu sombra
cuando uno encuentra ese equilibrio, encuentra la armonia..
si no se puede vivir en la superficie y encontrar un par en la misma onda
pero si no se suelta una, m'hija, no vamos a ningun lado.
Yo nunca he probado...
Cuando era adolescente y mis amigos consumian, la voz de mi madre venia a mi cabeza como un rayo: "Nunca te drogues".
Es asi como llegue a mis casi 28 años, orgullosa de nunca caer en esa...
Besos.
como te fuiste a perder las aguas de xcaret???!!!!
en fin, como tu dices, si no se hizo para ti... pero algún día deberías probar... es hermoso!
Yo no soporto la idea de meterme en el mar, piscina o similar... me da pánico.
Sin embargo nunca me ha sentado mal la marihuana.
Es el arte de sentir que la sensibilidad emocional y la reacracion mental convergen de manera tal que el mundo, por ese instante, fue hecho pura y exclusivamente para vos.
Figura entre mis habitos (sin llegar a la adiccion) y me resulta comodo y creativamente explosivo y divertido.
Ojo! Siempre con moderacion.
BesoTE. :)
Nunca probe marihuana... No te digo que nunca senti curiosidad, pero no tengo intenciones de hacerlo... y menos por lo que contas...
Concuerdo con el comentario que hizo Lorena, yo soy así... ni me quiero imaginar fumada, ya veo que todos mis miedos cobran más vida que nunca y me da un patatum porque tengo tanta suerte...
Besitos
nunca deberíamos hacer lo que no queremos, aún cuando la persona que nos quiere nos inquiera hacerlo.
ese chico no era para vos blondis! (ojalá yo me escuchara cuando me digo lo mismo! jajajaj)
un beso y un abrazote
jajajaja, muy divertido!!!
Gracias a lo que estudié, sé que el porro es algo relativamente inofensivo, incluso me atrevería a decir más que el tabaco, por más que esté socialmente peor visto. Nunca tocaría otra cosa, pero más vale que eso lo tuve que probar, y muy de vez en cuando fumo también, sólo con ciertos amigos. Pero tengo un problema: no me hace absolutamente nada, lo mismo que el alcohol.
Lo importante es que sea decisión propia y personal de cada uno, y nadie quiera enchufártelo compulsivamente, como este tocayo mío.
¡Saludos!
jajja blonda, muy divertido el relato. La primera vez que "fumé" estaba con un amiga en la casa de su madre. Sentía que un fuego salía de mi cabeza y que movía las manos incontrolablemente. Para explicarle a mi amiga lo que sentía le decía "soy bart simpson, soy bart simpson" y movía mis manos hacia arriba, como si tuviera la melena del personaje amarillo.
Yo probé dos veces, un par de caladas, y las dos veces me dio MUUUCHO SUEÑOO.
Me parece una bosta.
esta no la tenía!!!que bueno estar de nuevo por acá!!!
besote blondis
NOoo a mi la primera vez que probe me paso algo parecido, y le agarre como fobia, no me acordaba como habia llegado a mi casa y me dio mucho miedo..
Pasaron los años y volvi a fumar.. y fue genial debo confesarlo, jeje....
No soy adicta, pero de vez en cuando me clavo un faso y posteriormente 1/4 de helado
Dios ! Jamás la probé pero amigos que la fuman no describen de esa forma los efectos, creo que no a todos les " pega" de igual forma.
Besos
sabe qué, blondy?
hay cosas que dependen del compañero, aunque casi todo dependa de una. se ve que a usté no le han tocado buenos compañeros/as de aventuras.
sin embargo,no veo nada malo en sus "fobias", mientras no le tenga fobia a sentirse libre, eso estaría realmente mal para usté y su alma, me parece.
besos
(como es lunes, si lee el anónimo, mírelo de reojo, nomas. y ya)
Hola
La marihuana , como otras drogas, no es para todas las personas, a algunos les pega mal.
No sos la primera ni la ultima que va a tener malas experiencias.
A mi la marihuana no me pega igual a los 38 que a los 20 , a veces me descompongo.
Saludos
Jamas podria ni probar , me da mucho ascoooooooooo el olor!! me da nauseas! jajaja
beso amor!
Juancho!
No sé si pondría la palabra prohibiciones, sino cosas que no deseo hacer o repetir... Creo que uno hace cosas si le agrada, si le genera algo movilizador o para probarlas (onda no se puede decir no me gusta si no lo probaste).
Además de visión borrosa y todos los otros efectos, también te dio muchisima hambre!! Jajajaj!!!
Besos!!
Nunca en lo que llevo de vida probé marihuana, sí estoy en ambientes donde se fuma y mucha y hay otras cosas, pero no me interesa en absoluto. Me encanta el olor pero no me llama para fumar, es más, no puedo fumar porque no soporto el humo directamente, nada que tire humo me gusta.
Varias veces fumé cigarrillo, pero no lo paso, es más fuerte el rechazo al humo.
Mi hermana una vez probó y estaba realmente descompuesta y delirando, decía que veía dibujitos.
En fin, tengo vértigo, mucho y también me privé de subir a muchos juegos que me provocan mareo. Y si hay algo de lo que estoy muy segura es de que el porro no es para mi, es por falta de deseo, de interés y todo lo demás. Me es totalmente indiferente y en mi caso, hablo solo por mi, prefiero buscar otros estados mentales sublimando con aquellas cosas maravillosas que hay en la vida, sin necesidad de darme un estímulo con la marihuana o lo que sea.
Pero bueno, ahora ya sabes que eso no te gusta.
Besotes!
jajajajajaja no puedo haberme reído tanto!!! A mi una "amiga" me lo hizo probar en un boliche, estábamos en la pista de electrónica y era una pipeta tipo puntero láser y me dice, dale, metele una seca…. Al ratito parecía Jon Trabolta en la película de Fiebre de Sábado por la noche!!! Y ella que me decía… que estas bailando, si esto es electrónica!!! Nunca mas!!!
Besos
Blonda, me quede traumado! jajaja
ahora aclará que esa noche yo no había fumado marihuana!
lo mio es MUYYYY CARETA! :)
muy graciosa tu historia!
yo probé, y no me hizo gran cosa... creo que todo es según el estado de ánimo en que estás.
Pero lo mejor, es no entrar en necesitar algo de afuera para lograr buenos momentos.
y tambien está bueno haberlo probadi¿o, saber de que se está hablando, con que fundamenos decir estoy de acuerdo o en contra.
Quizas sea la puerta de entrada a cosas mas grosas, y eso si es malo.
lo bueno que ya sabes, porros, no!
un beso.
blonda,
ojo que si el botón de la muestra se sale, hay que usar y poner otro...
no debería ser el moemento para fumarlo... pero cuando estás tranca, relajado, mirando en una ventana el mundo pasar, extraño el churrito que me ayudaba a volar...
no me hizo ni mas canchero ni mas bobo, sencillamente dentro de mi soledad, me ayudó a volar...
hoy, hace mucho "que no vuelo"... y a veces me dan ganas... muchas ganas.
beso blonda!!!!
PD: Vengo con mucho laburo y estoy atrasado en la lectura de tu blog! No me lo puedo perdonar!!!
definitivamente, hay cosas que no se hicieron para mí tampoco. El año pasado quise ponerme a prueba e intentar superar aunque sea uno de esos obstáculos: me anoté en acrobacia aérea. ¿El resultado? Una hernia de disco que me acompañará eternamente. Definitivamente, hay cosas que no se hicieron para mí... :)
Un placer, como siempre.
Muchos besos!
Y Bob Marley qué culpa tiene en toda esta historia?
Ay Blondita...que manera de reirme!
Confieso que a mi me paso lo mismo.
Yo estaba acostumbrada a manejar el cuerpo con los efectos del alcohol, pero con marihuana no.
Senti el cuerpo muerto pero la cabeza lo suficientemente lúcida como para sentir esa especie de paralisis. Muy feo , muy feo...
Yo pasó, tampoco es para mí.
Me quedo con los cigarrillos convencionales y unos drinks.
Besos!!!!
Ya probé...poquito...no fue suficiente para sentir algo...no vuelvo a probar...así sera mejor.
Saludos,
M
yo tuve una experiencia similar y desde aquella vez nunca volvi a fumar cosas desconocidas
Decir que estuve a unos metros de Xcaret y no me alcanzaron los días para ir... No sé de lo que me pierdo igual, por suerte.
Y me reí mucho con lo del faso, qué te pasó? no es tan normal eso, por ahí fumaste demasiadas pitadas.
Me divierte mucho tu relato Rubita, aunque me parece que para vos vivirlo no fue nada divertido.
Feliz domingo!
Tal cual, vale para cualquiera, cada persona tiene su droga. Asi como algunos les cae terrible el café y otros andan por el 5to a las seis de la tarde. Yo no puedo tomar mas de un café al día ( y a veces ni eso) que me deja mal.
Ahora coincido, tu chico un desastre para hacerte probar. Y no me divierte si el otro no se divierte, para mi se termina ahí, te lo dice un superdrogón :)
Por otro lado, no puedo NI acercarme a la baranda de un balcón ni estar en medio de un muelle, el vacío te chupa!
Todavía no tengo idea porque me fascinaba la montaña rusa del Italpark, supongo porque creía que era segura...CREíA.
Jajaja, también recuerdo la primera vez que consumí, me daban chocolate y me hablaban todo el tiempo. Yo solo me quedé muda, estaba perseguida con que me explotara una neurona jajaja. Beso grande !!!!
Ir conmigo a un parque de diversiones es tirar la plata...solo pruebo los autitos y los botes chocadores y quizas si tenes suerte me subo a las tazas, pero mas de ahi no paso, los deportes de adrenalina no son mi debilidad, los evito de cualquier manera, nunca probe la marihuana, pero con tu post, ya puedo describir lo que se siente jajaja
un beso blondita
lo que me queda claro es qu e no habias probado antes el faso porque a nadie se le habia ocurrido convidarte...
yo tuve un ar de muetras, y me di cuenta que no me gust ael boton!
tucuMala
blondi blondi la pasaste un toque mal me parece...mis prohibiciones? cualquier droga CUALQUIERA, me dan fobia...pero al "faso" no le tengo miedo tengo amigos que fuman y son mas sanos que yo porq ni tocan el cigarrillo y se los ve siempre lucidos y saludables...no comparto pero no juzgo...
otra prohibicion nunca ni de casualidad me meteria en un submarino...
deportes extremos no hice pero me llaman...
y tengo algunas otras q no vienen al caso...
pero prohibidisimo tipo con mujer o novia...
cmo estas reina?
muaks
ah tu jefe es un PELOTUDO ZARPADO EN PELOTUDO...ME CAE MAL---
No entiendo el porque la ligó Bob Marley si la culpa la tenía el dealer que se las vendió re cortada, claro en esos casos el reclamo a defensa al consumidor no va.
Besos hermosa
Yo no probé nunca, Mis amigos nunca me convidaron porque me consideran demasido "moralista".
Jaja
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