Una primera mirada

Fines de Mayo de 2008

En la oficina están tomando mucha gente nueva.

En mi ritmo de trabajo, y entre tantos que somos, a veces no me detengo a ver quienes son los nuevos, hasta que se van transformando, lentamente, en viejos.

Somos tantos que compartimos las computadoras.

En la isla de cuatro donde yo me siento, noto que hay dos compañeros nuevos.

Supongo que hace unos días que están ahí y que jamás los miré.

Una mañana, escucho una voz que dice:

- Si,tengo una nena de dos años y medio.

Levanto la cabeza por detrás de mi monitor, y lo veo.

Es esa primera mirada que puede marcar un antes y un después en la vida de uno.

Cuando lo veo, me doy cuenta de que es chico.

Es medianamente alto, flaco, de pelo y ojos oscuros.Tiene inmensas pestañas, y una mirada dulce.

Le digo:

- ¿Cuántos años tenés?

- 23 - responde

- ¿Y tenés una hija de dos años y medio? - pregunto

- Si - responde

- ¡Algo habré hecho mal! Te llevo once años y no estoy ni cerca de tener un hijo.

Lo digo en tono divertido.
Mis compañeros que están cerca se ríen.
El también.

Tiene una sonrisa simplemente encantadora.