Cerveza mediante, me dedico de lleno al chat. De lo último que conseguí pescar es el único conectado (pienso que está tan solo como yo).
Lo saludo:
- Hola Totito (nunca me dijo como se llama, parece que lo anotaron como Toto cuando nació)
- Hola nena ( no debe haber entendido cuando le dije la edad que tenía)
- ¿Qué hacías? - escribo
- Nada, bah, me acordaba de mi ex - escribe
- Ese no es buen plan para un viernes a la noche - contesto
- No,claro, es que se me dio por acomodar unas cosas y encontré fotos de ella - comenta
Este es un punto a tener en cuenta, además de melancólico que roza lo patético, es masoquista.
Todos sabemos donde estan guardadas las fotos de nuestros ex, sobre todo de aquél que nos partió el corazón.Decir que aparecieron sin querer, o que se cruzaron en el camino, es igual a decir que teníamos ganas de torturarnos un rato imaginando que aquella persona tan bonita a la que aún amamos debe estar sonriendo igual que en la foto pero con un nuevo amor que seguramente es mejor que nosotros.
- Ah,las encontraste de casualidad,entiendo - miento para que no se sienta descubierto en su patetismo
- Si. Así que ahí estaba, mirando las fotos de Cristina - me dice como se llama la ex, así que intuyo que no va a querer seducirme nunca.
- Bueno,bueno,cambiemos de tema, ¿Viste alguna peli? - me había contado que le gusta mucho el cine
- Si, enganché en cable El padrino, así que la ví por quinta vez.La última vez la vi con ella- escribe
- Con Cristina - escribo
- Si,con ella - dice
- Bueno,son cosas de la vida,ya vas a estar mejor - digo por decir
- No creo,me está costando mucho olvidarla - escribe (cosa que yo ya había notado desde el día que lo conocí)
Chateamos más de dos horas.En ese tiempo me mostró varias poesías que le escribió, alguna que otra carta donde se asume un idiota y le pide por favor que vuelva, me contó como se conocieron y por que se pelearon, y muchos etcéteras.
Casi al finalizar la charla me escribe:
- Me encanta como me entendés.Estaría bueno que me invitaras a tu casa a tomar un café en lugar de chatear mil horas
- Bueno,vení cuando quieras - le digo,descartando cualquier opción más allá de ser amigos.
- Dale, mañana es sábado,voy a la tarde si querés -escribe
- Buenísimo, avisame cuando estás listo y te paso la dire - le contesto
Nos desconectamos,tarde.
Me acuesto,y en mi reflexión final del día me cuestiono:
¿Tengo necesidad de meter en mi casa a un tipo que está más triste que yo?
Antes de cerrar los ojos me pregunto quien será más patético de los dos.
2 Blondas y algunos rubios no se callaron:
Te felicito por la eleccion de las fotos, son muy buenas y van justo con lo que escribis! Besos
Alfa: Gracias!Lo hago con esmero y como para que sea un poco más fácil de interpretar lo que escribo.Beso!
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