Cuestión de peso

Viernes, sin plan para variar. Hace calor, así que decido pedir helado. Si no voy a salir, por lo menos voy a consolarme con algo rico.

Mientras espero el delivery abro la alacena y descubro que desde el estante me sonríe un paquete de papas fritas, y lo abro. Las papas no tienen el mismo gusto si no se acompañan con cerveza, así que incluyo sobre la bandeja un porrón de Quilmes.De paso que estoy en la cocina pongo a calentar una cacerola con agua para hacer unos fideos. LLevo la bandeja hasta el cuarto y la dejo al lado de la computadora.

Si hay algo para lo que tengo facilidad es para tapar todo lo malo que me pasa con comida.
Tengo un problema con un cliente, una discusión con mi jefe, una jornada laboral horrible, entonces de camino a mi casa me compro un chocolatito.
Discutí con mi vieja, tuve una sesión de terapia terrible, aumentaron las expensas, entonces me pido unas empanadas.
Tuve sexo con un tipo que vino a mi casa sin conocerlo y al que seguramente no volveré a ver, me preocupo por conseguirle un regalo que le va a encantar a un tipo al que le llevo 11 años y que no es mi novio, al que quiero que sea mi novio se lo tragó la tierra, y para colmo , en vez de salir y tratar de conocer gente nueva me encierro en mi casa a chatear , entonces me como un paquete de papas fritas, un buen plato de fideos con manteca,lo acompaño con una rica cervecita,y espero ansiosa que me traigan el helado.

Y cuando aparece la culpa, lo primero que me digo es:

- Si encima de todo no podés darte un gustito...